En resumen
- Un informe hecho por SlowMist registró los robos hechos en criptomonedas desde el 2012 y dicha cifra asciende a los 30 mil millones de dólares.
- Ethereum es la blockchain más afectada, con unos $3,100 millones robados.
- ¿Algún día mejorará la seguridad en los ecosistemas blockchain?
En la nota que redactamos sobre la vulneración de Poly Network, una red de puentes sobre blockchains, explicamos como en la primera mitad del año 2023 fueron robados $655.61 millones en criptomonedas. Esta cifra es exorbitante, sin lugar a dudas, pero está muy por debajo de los $1910 millones del primer semestre del 2022.
Ahora, un informe reciente de SlowMist, mostró que desde el año 2012 se han robado unos $30 mil millones en criptomonedas. Este registro tiene en cuenta los robos hechos con todas las variedades de métodos informáticos maliciosos.
Entre los más comunes se encuentran los ataques de vulnerabilidad de contratos, los tirones de alfombras, los ataques de préstamos rápidos, las estafas, la filtración de claves privadas y los viejos ataques de phishing.
De esta manera es como estos actores maliciosos han logrado robar un 2.5% aproximadamente de la actual capitalización de mercado cripto.
En Cardaniers usamos el Exchange Binance, a parte de que las comisiones por operación son las más bajas, solo un 0,1% por operación, además es el exchange más grande del mundo, por lo tanto el más solvente y el que más difícil es que quiebre y por lo tanto más improbable que puedas quedarte sin dinero. Puedes abrir una cuenta haciendo click aquí.
Pero el mejor año para los piratas informáticos fue el 2021, con más de $9,700 millones robados en 236 ataques. Esto coincide con el aumento del interés en las criptomonedas durante ese periodo.
Vale destacar que, desde el inicio del sector, los intercambios de criptomonedas han sido el objetivo principal para los piratas informáticos debido a las grandes participaciones que albergan:
De hecho, se han llevado a cabo más de 118 ataques en intercambios, resultando en una pérdida total de más de $10,900 millones. Algunos de los incidentes más notorios incluyen el hackeo de Coincheck en 2018, donde se perdieron $534 millones, y el hackeo de Mt.Gox en 2014, que resultó en una pérdida de más de $473 millones.
Lee, además: Bitcoin tiene el potencial de revolucionar el sistema financiero.
Ethereum, la blockchain con más proyectos de criptomonedas vulnerados
Ahora, si analizamos en que blockchain se alojan la mayoría de proyectos atacados, el “dedo acusador” apunta a Ethereum, que ha sido el más afectado, con 217 ataques y más de $3,100 millones robados. Aunque no debería de sorprendernos, pues recordemos que Ethereum es el principal ecosistema de proyectos Web3.
Le siguen de cerca la blockchain de Binance Smart Chain y EOS, con 162 y 119 ataques respectivamente. Además, se han perdido más de $200 millones en ataques a tokens no fungibles (NFT) y $2,000 millones en ataques a puentes.
Estas cifras asombrosas demuestran claramente la vulnerabilidad de la industria de las criptomonedas y resaltan la necesidad urgente de mejorar su seguridad.
Como hemos dicho, las pérdidas totales por ataques informáticos ahora superan los $30,000 millones.
Por otra parte, es importante destacar que no solo los intercambios y los proyectos DeFi son blanco de los ataques informáticos, sino que también los usuarios individuales están en riesgo:
La filtración de claves privadas y los ataques de phishing continúan siendo tácticas comunes utilizadas por los piratas informáticos para comprometer las cuentas y las billeteras criptográficas de las personas.
¿Algún día mejorará la seguridad en los ecosistemas blockchain?
La escalabilidad, interoperabilidad y seguridad siempre fueron vistos como esa tríada de retos que blockchain y las criptomonedas debían superar. Ahora mismo se ha avanzado enormemente en la interoperabilidad y escalabilidad, pero la seguridad sigue siendo “el talón de Aquiles” de esta tecnología.
Sin dua, aún falta bastante por mejorar en este ámbito y la seguridad debe ser una prioridad en todas las etapas del desarrollo y la implementación de proyectos criptográficos. Además, es crucial que se realicen inversiones en investigación y desarrollo para abordar las vulnerabilidades existentes y mejorar la ciberseguridad en el espacio criptográfico.
Lo que llega a ser desmoralizador muchas veces, es que los ataques y los atacantes parecen ir reinventándose a medida que evoluciona esta tecnología, siempre encontrando una manera de reinventarse, de encontrar nuevos métodos para extraer los fondos de los usuarios.
Claro, los criptoentusiastas debemos autoprotegernos y para ello te recomiendo leer: Cómo almacenar y proteger tus criptomonedas de forma descentralizada.